pareidolia

La pareidolia, según Wikipedia, es un fenómeno psicológico (ojo, no es una patología) donde a una imagen indefinida le atribuimos una forma reconocible y cuando en realidad no hay más que estímulos vagos y difusos. Esto nos pasa cuando "vemos" animales o figuras en en las nubes y en otros objetos naturales, o la cara de Baby Etchecopar en las tortillas de papa, etc. Quizá se acuerden de los talk shows que con las ruinas de las Twin Towers todavía tibias, hablaban de los rostros que se veían en el humo. Estas lecturas necesariamente remiten a un entorno para ser visibles y esta percepción se utiliza también en el test de Rorscharch (esos cartones donde te muestran manchas y te preguntan qué ves). Hay una zona del cerebelo, el gyrus fusiforme en el lóbulo temporal, que algunos investigadores piensan que se ocupa del reconocimiento de caras. Dalí tiene unas cuantas obras que trabajan sobre la reconstrucción de una imagen a partir de una escena.

Quizá conozcan al Indio acostado en San Juan o el Pulgar de Dios en las montañas. Esto se asocia con la hierofanía, que a su vez está vinculado a las experiencias religiosas donde se revelan imágenes místicas. Es común en las culturas precolombinas, pero a no confundir con las figuras de Nasca que fueron producidas por el hombre. Desde Google Maps se puede ver esta imagen de Perú donde aparece un rostro de Cristo. Suena la banda de los Expedientes X: en la superficie de Marte, más precisamente en Cydonia, también aparecieron rostros y otras formas.
La criptoarqueologia se dedica justamente a encontrar estas formas y existe un blog muy interesante para curosear.
De vuelta a la tierra, existe un pool de fotos general de pareidolia en Flickr , un grupo de trabajo y también una colección sobre elementos de Jim Leftwich.